Oración a María Auxiliadora para momentos difíciles

María Auxiliadora es una de las advocaciones más populares de la Virgen María. Se le atribuyen muchos milagros y gracias, por lo que es considerada por muchos católicos como una protectora en los momentos difíciles. Si estás pasando por una situación complicada, te invitamos a hacer esta oración a María Auxiliadora.

María Auxiliadora es una advocación mariana que se remonta al siglo XVI, cuando se le atribuyó a la Virgen María el auxilio en la batalla contra los turcos en Lepanto. Desde entonces, muchos fieles han acudido a ella para pedir su ayuda en momentos de dificultad.

Oración a María Auxiliadora

Dios te salve, María, llena eres de gracia,
el Señor es contigo,
bendita tú eres entre todas las mujeres
y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús.
Santa María, Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

María Auxiliadora, madre de Dios y madre nuestra, acudimos a ti en este momento de dificultad. Tú que eres la estrella del mar, la luz en la oscuridad, la protectora de los necesitados, te pedimos que nos ayudes en nuestra aflicción.

Tú que eres la auxiliadora de los cristianos, la que intercede por nosotros ante tu Hijo, te pedimos que nos concedas la gracia que tanto necesitamos. Te pedimos que nos ayudes a superar esta dificultad, que nos des la fuerza y el coraje para seguir adelante.

Te pedimos que nos ayudes a ver la luz al final del túnel, que nos guíes hacia la solución de nuestros problemas. Te pedimos que nos protejas de todo mal, que nos cubras con tu manto de amor y misericordia.

María Auxiliadora, te pedimos que intercedas por nosotros ante tu Hijo Jesús, que escuches nuestras súplicas y nos concedas la gracia que tanto necesitamos. Te lo pedimos con humildad y confianza, sabiendo que tú eres nuestra madre y que siempre velas por nosotros.

La oración a María Auxiliadora es una poderosa herramienta para los momentos difíciles. Si estás pasando por una situación complicada, no dudes en acudir a ella con fe y confianza. Recuerda que María siempre está dispuesta a ayudarnos y a protegernos, y que su amor y su misericordia son infinitos.

Recuerda también que la oración debe ir acompañada de la acción. Si estás pasando por un problema, no te quedes de brazos cruzados esperando un milagro. Haz todo lo que esté en tus manos para solucionar la situación, y confía en que la ayuda de María te guiará hacia la solución.

Esperamos que esta oración te haya sido de ayuda. Recuerda que siempre puedes acudir a María Auxiliadora en cualquier momento y en cualquier situación. Ella siempre está dispuesta a escucharnos y a ayudarnos. Que Dios te bendiga.